Cómo seguir viviendo en tu casa después de haberla vendido

Cómo seguir viviendo en tu casa después de haberla vendido
6 marzo, 2018 REDPISO NEWS
disfruta tu casa

Se llama nuda propiedad, y permite a una persona disfrutar y vivir en su casa sin tener la posesión de la misma, una opción que, según sostiene el consultor inmobiliario Eduardo Molet, cada vez está ganando más adeptos.

Cuando alguien adquiere una vivienda, obtiene lo que se conoce como pleno domino. El pleno domino se divide entre la nuda propiedad y el usufructo vitalicio. Según explica el experto inmobiliario, «en este caso estaríamos hablando de vender solo la nuda propiedad, con lo cual la persona seguiría disponiendo mientras viviese del usufructo de la casa”. Así, aunque el nudo propietario sea dueño de la vivienda, no podrá disfrutar de ella hasta la extinción del usufructo. Una vez llegado el momento, tendrá todo el derecho a disponer de la propiedad en buen estado.

Los perfiles más comunes entre los que optan por la nuda propiedad son los de aquellos que no tienen herederos, gente mayor que quiere aumentar sus ingresos para vivir más cómodamente y poder disfrutar de su tiempo libre y los que quieren asegurar el bienestar de sus hijos.

La clara ventaja de este derecho es poder seguir haciendo uso de la vivienda para siempre. Una seguridad avalada legalmente con las máximas garantías, una vez registrado y con escritura ante notario. El dinero de la venta se recibe en el instante de la cesión de la nuda propiedad y de una sola vez, permitiendo al usufructuario disfrutar de su propiedad y recibir esta compensación económica. Además, los gastos serán menores para el vendedor, ya que pasaría a pagar solamente aquellos correspondientes a los consumos ordinarios como agua, electricidad, gas… mientras que el inversor se haría cargo desde ese momento del IBI y las derramas extraordinarias de la vivienda.

Otras empresas también han notado un incremento continuado en la demanda de esta fórmula. Según los datos de otras consultoras, “la gente cada vez conoce más este método, lo que conlleva un cambio de mentalidad que nos acerca más a Europa, de tal forma que tanto las personas mayores como sus entornos familiares, son favorables a la utilización del patrimonio inmobiliario para mejorar sus ingresos y con ello su calidad de vida”.