Cuando se pone a la venta una vivienda a través de una inmobiliaria o de un portal inmobiliario en Internet, las fotos que le hagamos a la casa serán las responsables de que los posibles compradores se fijen en ella o no. Las fotos serán los primero que vean los clientes y serán lo que les entre por los ojos antes de conocer cualquier propiedad o característica del inmueble, por lo que si les gustan seguirán leyendo y si no pasarán a la siguiente vivienda. La calidad de las fotos puede ser la diferencia entre vender una vivienda o no, por eso desde Redpiso queremos daros una serie de consejos para no cometer errores a la hora de fotografiar una vivienda en venta.
Antes de empezar, hay que saber que la casa tiene que estar ordenada y limpia para tomar las fotografías y que no deben salir en ellas personas ni mascotas.
En primer lugar, es recomendable utilizar un trípode para que las fotos no salgan movidas y ver si es mejor hacerlas en horizontal o en vertical en función de cada estancia. Cuando las subamos a la red tendremos que tener cuidado de que no se suban giradas, ya que esto le restaría calidad a nuestro anuncio y los clientes no podrían verlas bien. Por otro lado, la iluminación que aparezca en nuestras fotografías será uno de los puntos clave para que éstas resalten por encima del resto de fotos de inmuebles. Hay que tener cuidado con los contraluces, que no suelen ser atractivos, y nunca utilizar el flash. Aunque sea de día, es bueno encender las luces para ganar en luminosidad.
Camina por toda la estancia para ver cuál es el mejor ángulo desde el que fotografiar y coloca la cámara a la altura de los ojos para que la proporción sea buena y la gente pueda imaginarse viendo las estancias. Además, procura que las fotos no salgan torcidas y que las líneas se vean rectas y haz primeros planos de ciertos objetos relevantes o llamativos.
Si la casa dispone de jardín, deberás aprovecharlo al máximo porque puede ser uno de los motivos por los que se venda la casa y que más llamen la atención. Para esto es recomendable elegir bien la hora. ¿Sabes lo que es la “hora dorada”? Es el mejor momento para fotografiar los exteriores y se corresponde con el amanecer o con el atardecer, donde los contrastes son más suaves y las luces más cálidas. No es recomendable hacer fotos a mediodía o en días nublados, ya que el sol hace más atractivos los exteriores. Aprovecha que no haya viento, pues los movimientos bruscos de plantas u objetos debido al aire son molestos.
Por último, puedes jugar un poco con la edición y, sin recurrir a grandes programas de retoque fotográfico, mejorar ligeramente las fotografías. Mejorar el contraste, los brillos y la saturación harán que nuestras fotos sean más llamativas y atractivas para los interesados en la propiedad.
