Decorar con objetos reciclados es una opción cada vez más recurrente para decorar un espacio ya que, además de resultar económico, contribuye al medio ambiente, dando a esos objetos una segunda vida útil, y le otorga a la vivienda un carácter particular y único.
¿Por qué no podría convertirse un palé en un sofá moderno, práctico y cómodo? ¿O una botella de cristal en una exclusiva lámpara o portavelas para nuestra casa o jardín? Todo depende de nuestra imaginación y nuestra habilidad para transformar las cosas. Si navegamos un poco por internet descubriremos un mundo impresionante dedicado a decorar con objetos reciclados.
Decorar con objetos reciclados: lámpara con botellas
¿Qué podemos hacer con las botellas de vino que tenemos vacías después de una cena en casa? La opción más sencilla es llevarlas al contenedor de vidrio para que sean recicladas, pero la más original es convertirlas en portavelas o lámparas que decoren nuestra casa o jardín. La técnica para transformarlas no es muy complicada y en Internet hay un sinfín de tutoriales que nos pueden ayudar. Un poco de imaginación, tiempo y maña es lo único que necesitamos.
Un sofá hecho con palés
Otro mueble muy recurrente y de moda hoy en día es un sofá hecho con palés. Su realización es sencilla y el resultado realmente sorprendente. El nuevo sofá puede decorar tanto una terraza o un jardín como el salón de casa, y con un buen relleno y un estampado moderno resulta muy original y aportará personalidad y carácter a nuestro hogar. Es más, con palés viejos podemos hacer multitud de muebles: estanterías, librerías, zapateros…
Reciclar latas para decorar
Las latas de tomate o conservas pueden reutilizarse de muchísimas maneras. Simplemente dándoles una mano de pintura pueden convertirse en macetas, botes para guardar bolígrafos y lápices, servilleteros, portavelas… Solo hay que tener en cuenta limpiarlas bien antes de usarlas.
En resumen: el reciclaje de muebles y objetos le puede otorgar a nuestro hogar un carácter personal y único difícilmente imitable. Además, es poco costoso y contribuye a la sostenibilidad de nuestro entorno. Por último, dedicar unas horas a los trabajos manuales produce satisfacción personal, reduce el estrés y agudiza el ingenio.
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1 Comentario
un post espectacular, que gustazo leer así, gracias administrador.
