
En medio del ritmo acelerado del día a día, tener un rincón de descanso en casa puede marcar una gran diferencia. La buena noticia es que no necesitas reformas ni grandes inversiones para crear un espacio chill out donde desconectar, leer o simplemente respirar. Hoy te damos claves para conseguirlo con pocos elementos y mucho estilo.
Escoge el rincón perfecto
No hace falta tener una gran terraza o un salón amplio. Cualquier espacio puede convertirse en tu chill out particular: una esquina del dormitorio, un balcón, el salón o incluso el hueco bajo una ventana. La clave está en separar visualmente el área para que transmita calma.
Puedes usar una alfombra o una cortina ligera como delimitador. También funcionan bien los biombos o estanterías abiertas, que dividen sin encerrar.
Apuesta por materiales naturales
Un ambiente chill out se caracteriza por su calidez. Para conseguirla, los materiales naturales como el ratán, la madera clara, el lino o el yute son perfectos. Además de aportar textura, generan una atmósfera relajante que invita a quedarse.
Coloca una alfombra de fibras naturales, algunos cojines de suelo, una manta de algodón y algún asiento bajo como un puf o un banco.
La importancia de la luz
La luz es fundamental para crear un ambiente chill out. Evita la iluminación blanca o demasiado intensa. Lo ideal es usar luces cálidas que puedas regular, como guirnaldas, farolillos, lámparas de papel o incluso velas LED.
Si tu rincón está cerca de una ventana, aprovecha la luz natural durante el día y complementa con luces suaves por la noche. El resultado será acogedor y funcional.
Añade plantas y pequeños detalles
Unas cuantas plantas bien colocadas aportan vida y frescura. No necesitas convertir tu casa en una jungla: basta con un par de macetas con lavanda, aloe vera o alguna planta colgante. También puedes colocar plantas artificiales si no tienes buena luz o tiempo para cuidarlas.
Agrega pequeños elementos decorativos que te conecten con la calma: una bandeja de madera, una figura de cerámica, una vela aromática o una lámpara de sal.
Un rincón chill out en el balcón
Si tienes un balcón, por pequeño que sea, aprovéchalo. Con una colchoneta, cojines y una vela de sombra, puedes montar una zona perfecta para descansar. Añade una mesita auxiliar y un par de plantas, y tendrás tu oasis urbano sin salir de casa.
Piensa en tus sentidos
Un espacio chill out no solo se ve: también se escucha y se huele. Puedes acompañar tu rincón con una lista de música suave o sonidos de naturaleza. El aroma también importa: un difusor con aceites esenciales, como lavanda o eucalipto, completa el ambiente.
Desde Redpiso te animamos a crear tu rincón de relax adaptado a ti. Ya sea en un pequeño balcón, un salón o una habitación, siempre hay una forma de ganar bienestar en casa. Y si sueñas con un hogar con más espacio exterior, te ayudamos a encontrarlo.
Un espacio chill out no tiene reglas estrictas. Se trata de crear un lugar que te haga sentir bien, que invite a parar, respirar y reconectar contigo. Con poco, puedes lograr mucho.